Hoy por hoy es necesario hablar sobre los efectos de los vehículos autónomos inteligentes desde perspectivas futuras. Es por ello que se fomenta una visión general de los futuros vehículos y se promueve el potencial de desarrollo de los mismos. Para ser específicos, este artículo busca ofrecer a los lectores una descripción general del desarrollo de vehículos.
Posteriormente también presenta el potencial de los vehículos inteligentes, las tecnologías clave que se necesitan para dichos vehículos. En este también se analiza las barreras en el desarrollo de vehículos modernos. El capítulo servirá como punto de partida para las personas que quieran seguir trabajando en estos vehículos y ayudarles a comprender el estado general de los futuros vehículos La conducción autónoma es un campo con un futuro prometedor. La sociedad humana depende extremadamente del transporte.
En el mundo hay alrededor de 1.400 millones de vehículos, decenas de millones o incluso cientos de millones de conductores manipulan vehículos en todo el mundo cada día, lo que supone un gran consumo de mano de obra. Los nuevos automóviles inteligentes, incluidos los vehículos sin conductor, se han convertido en un tema candente de preocupación para los reguladores y la industria en los últimos años. La conducción autónoma inteligente se ha definido como la dirección del desarrollo en los próximos 10 años.
El desarrollo de vehículos autónomos
En agosto de 1925, Francis P. Houdina, un ingeniero eléctrico del ejército estadounidense, presentó un automóvil radiocontrolado llamado "American Miracle". Mediante radiocontrol, el volante, el embrague, los frenos y otras partes del vehículo se pueden controlar de forma remota. Según el New York Times, el vehículo radiocontrolado puede arrancar el motor, girar las marchas y tocar la bocina como una mano fantasma al volante. Está muy lejos de la “conducción automatizada”, pero fue el primer vehículo autónomo documentado en la historia de la humanidad.
La corriente que fluye, que pasa a través de los cables incrustados en la carretera, podría manipularse y decirle al vehículo que mueva el volante hacia la izquierda o hacia la derecha.
Durante los siguientes casi 20 años, el desarrollo de la tecnología de conducción autónoma se topó con un cuello de botella y se desarrolló más lentamente, sin avances significativos. A medida que la tecnología ha avanzado, también se ha mejorado la capacidad de detección y reacción del entorno de los vehículos autónomos.
A medida que el programa sin conductor avanza constantemente, cada vez más personas descubren el potencial y las oportunidades de la “conducción autónoma”.
¿Por qué los vehículos autónomos inteligentes tienen un enorme potencial?
La tecnología de los vehículos autónomos tiene el potencial de transformar los desplazamientos y las experiencias de viajes de larga distancia, alejar a las personas de entornos laborales de alto riesgo y permitir un mayor grado de desarrollo, además de colaboración entre industrias. También es la clave para construir nuestras ciudades del futuro.
En el futuro, la relación del ser humano con los vehículos se redefinirá a partir de la reducción de las emisiones de carbono y allanando el camino hacia niveles de estilos de vida más sostenibles.
Los vehículos autónomos podrán viajar de manera más eficiente por la carretera que los vehículos operados por conductores humanos.
Esto conducirá a una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, los vehículos se pueden agrupar en “pelotones” y reducir el número de accidentes.
Estos pueden mantener el flujo de tráfico continuo. Una menor congestión significa que los pasajeros pueden llegar a sus destinos más rápido y pasar menos tiempo en la carretera, lo que a su vez genera una mayor eficiencia del combustible y reduce las emisiones de CO2. Es probable que los vehículos también se comuniquen con la infraestructura vial, como las señales de tráfico, para ajustar el consumo de combustible y las emisiones en consecuencia.
Los servicios de taxi, los coches compartidos y el transporte público serán más rápidos y baratos a medida que avance la revolución de los vehículos autónomos. Por lo tanto, se espera que el costo de estos servicios disminuya a medida que disminuyan los requisitos de mantenimiento, gas y mano de obra. De esta manera, las diferencias de costos entre la compra de un automóvil propio y el uso de estos servicios de viajes se ampliarán hasta un punto que redefinirá la forma en que las personas viajan.
La seguridad de los vehículos autónomos inteligentes
Esta se define como su capacidad para mantener seguras a las personas y reducir las tasas de accidentes cuando los vehículos autónomos funcionan correctamente. Las investigaciones muestran que los automóviles autónomos inteligentes son más seguros que los conductores humanos promedio.
En primer lugar, las máquinas perciben mucho mejor que los humanos. El vehículo autónomo tiene varios sensores, radares y cámaras nítidos, que pueden percibir un rango más amplio que el humano mientras conduce. Las actualizaciones de hardware permiten a los vehículos "ver" el mundo que los humanos no pueden ver de una manera más lejana, más amplia y más clara.
Además, puede ver muchos ángulos diferentes al mismo tiempo, lo que está más allá del alcance de la percepción humana. Por ejemplo, Tesla tiene ocho cámaras montadas alrededor de la carrocería (dos en la parte delantera, dos en los lados izquierdo y derecho, y dos en la parte trasera), que proporcionan una visión de 360 grados y un alcance de 250 metros.
Los vehículos inteligentes tienen más energía que los humanos. A nivel mundial, la conducción fatigada se ha convertido en una de las principales causas de accidentes de tráfico.
Tecnologías clave necesarias para los futuros vehículos autónomos inteligentes
Desde una perspectiva futura, los automóviles inteligentes se desarrollarán desde baja velocidad hasta alta velocidad, desde el transporte de mercancías hasta personas, desde el uso comercial hasta el civil. Son un sistema de ingeniería complejo que requiere la integración y cooperación precisa de varias tecnologías, que incluyen algoritmos, sistemas cliente y plataformas en la nube.
Los vehículos autónomos inteligentes se utilizan para comprender el entorno circundante del vehículo y proporcionar una planificación segura y confiable para el viaje y la llegada del vehículo.
