Las entregas fallidas están en el top de los grandes dolores de cabeza si se tiene un servicio de delivery. Las razones son bastante obvias: si un negocio no logra entregar un pedido en el tiempo estimado o en las óptimas condiciones, el usuario se sentirá decepcionado del servicio. Lo que puede hacer que se pierdan clientes que empezarán a optar por otro entre la competencia.
Según Harvard Business Review, cerca del 20% de los paquetes no se logran entregar en la actualidad al primer intento. Es por este motivo que las empresas que tienen operaciones logísticas, deben generar estrategias que les ayuden a evitar retrasos en las entregas. Mientras se cumplen con los tiempos prometidos al cliente. Pero, ¿Qué necesitas para no tener dolores de cabeza? Aquí te lo contamos.
El impacto de una mala entrega
Tras el crecimiento del e-commerce en los últimos años y la llegada de nuevas tendencias de envíos cada vez más rápidos, las empresas de delivery han aumentado su volumen de entregas. Por lo que tienen que gestionarlas de una forma más eficiente para que no resulten fallidas. Además, estos errores implican distintos gastos operacionales, relacionados sobre utilización de los autos, ocupación de trabajadores para repetir tareas, gestionar devoluciones, entre otros.
Según un estudio realizado por PCA Predict, el costo económico de una entrega no realizada asciende a 16 dólares. Además de que cada año genera 420.000 toneladas de CO2, lo que termina siendo dañino tanto a nivel medioambiental como económico.
Tipos de entregas fallidas y sus principales razones
Hay dos tipos de entrega fallida, primero hablaremos del fallo parcial de la entrega. Es cuando el envío no se ejecuta durante el primer envío, por lo que este es marcado como “no entregado a tiempo”. Y el segundo, el fallo permanente de la entrega, que es cuando no se ejecuta en el último envío, por lo que este es marcado como “fallido”.
Las principales razones de que las entregas de tu servicio de delivery fallen es que se deban a la falta de comunicación entre la empresa encargada del pedido y el cliente. Puede suceder cuando la dirección está incorrecta o incompleta, entre otras causas más habituales.
Entregas fallidas en la industria
Para este sector, el desafío se torna complejo cuando aumenta la demanda de pedidos. Ya que si no se cuenta con una planificación logística que sea eficiente para cumplir con las demandas del cliente, hay más riesgo de que la entrega no se complete.
En otro ámbito, una empresa que realiza una entrega a otra empresa, como ocurre en la industria B2B, tiene que adecuarse a las restricciones horarias de los clientes. Cuando los lugares de almacenamiento solo pueden recibir mercancía a una hora determinada.
Otro caso en que las entregas fallidas son un aspecto crítico es en el delivery de los negocios de comida. Y es que en este nicho importa si desde la cocina de un restaurante salió un plato bien presentado, con la temperatura adecuada. El cliente debe recibir eso mismo o pierde importancia el trabajo previo. Por eso es cada vez más importante que los negocios se preocupen de los detalles para que la experiencia sea exitosa, evitando que el reparto falle.
¿Cómo evitar las entregas fallidas?
Como ya hemos visto a lo largo del artículo, los envíos son un gran reto para la logística de un servicio de delivery. Por eso es clave que sepas qué prácticas necesitas para evitarlas, aquí te mostramos algunas de ellas.
Coordina con tu cliente varias opciones de entrega
Es importante que haya una coordinación con el cliente para que no haya malentendidos, lo que es posible gracias a las apps como la de ToolRides. En el caso de envíos grandes o más importantes, para evitar confusiones, debes asegurar que el cliente brinda distintas opciones de entrega, los datos precisos de su dirección de envío, si habrá un destinatario distinto, entre otras.
El tipo de transporte más indicado
La rapidez de la entrega es fundamental y más con el estilo de vida agitado de la actualidad. Por eso, el transporte tiene que ser el más apropiado para lograr cumplir su propósito. Por ejemplo, para el nicho de restaurantes y comida rápida, es más conveniente realizar las entregas en una motocicleta o bici. O, si se necesita transportar mercancía pesada, como un mueble, lo ideal es un camión.
Monitorear los factores externos
Son muchos los factores que inciden negativamente en una entrega. Los principales son el tráfico en las calles, los tiempos y horarios de los clientes (sobre todo si son otras empresas), condiciones climáticas adversas, entre otras. En este contexto, es vital mantener un estado de alerta sobre los posibles imprevistos y una comunicación constante con los conductores.
Planes de contingencia
Ningún imprevisto en tu operación debería ser una excusa hacia el cliente. No porque no surjan, sino porque siempre hay que estar preparados. Tener planes de contingencia para distintos escenarios proveerá inconvenientes; por ejemplo, cuando un conductor se accidenta o se ve atrapado en un embotellamiento. Puedes prevenir el tráfico tomando rutas alternas gracias a los avances en enrutamiento.
Brinda información en tiempo real
Hoy los clientes exigen tener información completa en tiempo real de sus pedidos y deberías asegurarte de brindarle esa opción. Con una app podrán saber hasta las rutas que toma el conductor con el sistema GPS. Se posee un chat en el preguntar dudas y métodos de pago digitales para mayor seguridad de los involucrados.
Tomar al toro por los cuernos
Ahora bien, ¿qué herramientas necesitas para poder gestionar exitosamente estas prácticas? Como ya hemos mencionado, con la app de ToolRides puedes cubrir distintos frentes a la vez. Ofrecemos la tecnología que tu servicio de delivery necesita para evitar las entregas fallidas, además puedas gestionar de manera más eficiente.
