Este año la crisis climática dió un ultimátum a todos, pero a la vez es una oportunidad de descarbonizar con los automóviles eléctricos. Este cambio en los sistemas de transporte a los que estamos acostumbrados es cada vez más urgente. Consciente de esta situación, el Banco Interamericano de Desarrollo ha estado apoyando a los países de Latinoamérica y el Caribe.
Se ha estado conversando bastante sobre lo necesario que es diseminar conocimientos y conversar sobre los avances o desafíos que cada país enfrenta. Contribuyendo a la causa el BID creó EMOVILAC, una plataforma digital regional abierta que tiene por objetivo generar un espacio para estos intercambios. Este es un entorno para la electromovilidad, intentando superar las barreras actuales y lograr verdaderos beneficios.
¿De qué se trata la EMOVILAC?
En el lanzamiento de EMOVILAC estuvieron presentes los principales impulsores del ecosistema de la movilidad eléctrica. Este se ejecutó de manera conjunta con el inicio del programa de financiación para la región. Se dió está iniciativa gracias al Banco Interamericano y el Fondo Verde del Clima. EMOVILAC es un espacio virtual, ya que sus creadores vieron más allá de las personas que pudieran llegar a un espacio físico.
El diálogo, que facilita la identificación y el acompañamiento en la implementación de proyectos de electromovilidad es una de sus prioridades. A su vez, quieren fomentar la formación técnica, siempre con la búsqueda de que estos conocimientos no se estanque, más bien se compartan. Con la ayuda de información actualizada de políticas, normativas, inventarios de emisiones, incentivos y puntos de recarga.
Características de la EMOVILAC
EMOVILAC está proyectado para 26 países del territorio latinoamericano y caribeño. Una de sus características más destacadas radica en la creación de comunidades de práctica multisectoriales. En estás los que se inscriban pueden encontrar foros para compartir sus experiencias y empaparse de las novedades.
El Gerente del Sector de Infraestructura y Energía, Ariel Yepéz-García en el evento de lanzamiento planteó: “nuestro deseo es que la plataforma se convierta en el espacio preferido por todos los actores de la movilidad sostenible en la región". Además, comunicó que funcionará perfectamente para encontrar las mejores prácticas, y dialogar hasta llegar a una idea sólida y generar una mayor confianza.
¿Por qué es tan importante que hayan estos avances?
El sector transporte es el mayor consumidor de energías fósiles en la región, como es natural en países que solo usan gasolina y gasoil. Por lo que es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero. Estas a su vez impactan a nivel global en la aceleración de la crisis climática. Sin embargo, a nivel local afecta a la salud y la calidad de vida de los habitantes de 95% de los habitantes.
Tendencias positivas que se mantendrán
Si bien la tendencia a usar automóviles eléctricos fué por la novedad del avance tecnológico, ya está en proceso de aceleración. Las ventas de estos vehículos han aumentado en todo el mundo, de más de un millón en 2017 a más de 10 millones en 2022. Aunque es una realidad que el total de estos en Latinoamérica es menor al resto del mundo, pero las estadísticas muestran que se duplicarán.
Según el Electric Vehicle Outlook de 2022, esta tendencia indica que para el 2040 más del 50% de los autos vendidos serán eléctricos. El transporte público también se está involucrando, existen países como Colombia y Chile dónde incorporaron buses eléctricos. Ellos sirven como ejemplo y guía para repensar los sistemas de transporte actuales, es ecología de la mano con la calidad.
Beneficios extras de la tendencia
La electrificación del transporte trae nuevas oportunidades de desarrollo en la creación de nuevas cadenas de valor. Se están empezando a necesitar empresas de tecnología para la reparación, mantenimiento, reacondicionamiento y reciclaje de baterías. Con esto llegarán oportunidades de transformación para la obtención de materias primas como el litio y el cobalto.
Efectos secundarios que atravesar
Los estados y entidades de toda Latinoamérica tienen que liderar la profunda transformación que conlleva la electromovilidad. Esto solo se podrá lograr con cambios estructurales que remuevan las barreras existentes. El cambio debe ser en los entornos normativos, la política fiscal, el desarrollo de talento especializado y la descarbonización de las matrices energéticas.
Claro está, que todo esto debe ir de la mano con una planeación proactiva de todos los niveles gubernamentales, tanto de forma local como nacional. Los anteriormente nombrados son solo algunos de los requerimientos para acelerar esta transición a automóviles eléctricos. Cómo todo tipo de cambio, al principio es cuesta arriba y más hablando de algo tan significativo.
¿Cómo ha sido el trabajo hasta ahora?
Para poder lograr todo este cometido, el BID ha proporcionado asistencia técnica en materia de política, estrategia y regulación. Además de ser apoyo en el desarrollo y financiamiento de gran cantidad de estudios de viabilidad para electrificar sistemas de transporte público. Y, principalmente analizar alternativas a sistemas de automóviles eléctricos, transporte fluvial y marítimo.
Igualmente han avanzado con financiamientos concretos por medio de préstamos de inversión en infraestructura de carga, flotas eléctricas, o préstamos de reformas de políticas. Están enfocados en brindar espacios con los que se pueda contar para el intercambio y enseñanza. Ya que ellos saben que es un elemento clave para conectar las ideas con soluciones, para así proveer un apoyo oportuno.
Juntos para lograrlo
Una persona puede tener una idea increíble, pero solo si un grupo se dispone se logrará la diferencia. Esto mismo puede aplicarse al transporte y sus cambios, hay actualizaciones, sin embargo, estas necesitan apoyo. Dar un espacio para que se converse sobre todo lo que puede realizarse es un paso más grande de lo que muchos podrían creer. Así como la aplicación de automóviles eléctricos será el inicio de un futuro más verde y mejor.
